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Pedro Pacheco, alcalde de Jerez (perdón delegado de política territorial) ha hecho unas declaraciones muy sabrosas sobre su socia de gobierno. Podría quizás achacarse al mismo algunos de los comportamientos que le imputa a la alcaldesa, pero hay que reconocer que está cargado de razón. Pacheco, más que por sus valores, ha sido eterno en la ciudad por la falta absoluta de contrincantes que ha tenido. Hoy por hoy la frase más vale malo conocido que bueno por conocer, se podría decir que más vale Pacheco conocido que nefastos por conocer. Es normal que se diga que Pacheco es realmente el alcalde, como alguien me dijo el otro día es ya un dios, aunque suene esto a blasfemia. Pilar Sánchez vive sus días de vino y rosas, pero posiblemente le queden sus últimos meses de gloria. Lo mejor que le podía pasar a Pacheco es que Pilar rompiera el pacto, para que se comprobase cómo se puede gobernar desde el desastre y el desatino. Sí mucha imagen, mucha telegenia, mucha foto, hoy prometo un segundo hospital, mañana porque no un puerto deportivo en el Portal, que más da. Y esas imágenes enternecedoras para mostrar ante la cámara sonrisa de cocodrilo. Tres manifestaciones se hicieron para que la niña que sufre espina bífida se escolarice en el colegio más cercano a su casa, pero cuando la alcaldesa cayó en la cuenta de la bonita foto que quedaba con la niña en sus brazos el problema se solucionó en un plis plas. Rodeada de palmeros, la alcaldesa hace sus mejores poses ante el poste anunciador de un parque o para demostrar su talante solidario prueba en la feria la sensación de ser invidente. Tiene razón Pacheco cuando dice que Pilar es una copia de Zapatero, yo diría más es una mala copia del propio Pacheco, de la García-Pelayo y de Rodríguez Zapatero. Gobernar lo que se dice gobernar más bien poco. Ser alcalde y no tener urbanismo es como tomar café sin café, por eso solo queda la foto y las falsas promesas. ¿Y el partido de Pilar Sánchez? Como siempre roto y tomando las familias, las tribus, los corpúsculos posiciones para las próximas elecciones. La alcaldesa feliz rodeada de palmeros en busca del maná del agradecimiento. Por el camino muchos cadáveres y grandes olvidados. Pero Pilar tiene realmente mucho que hacer, muchos actos a los que asistir, muchas cintas que cortar, quizás, por ello, que olvide a alguno es perdonable, aunque sea compañero de partido y hasta quien sabe miembro de su ejecutiva. Si es capaz de enternecerse de una niña enferma ¿cómo olvidar al compañero enfermo? O es que el compañero era íntegro o se negó a ser palmero de nadie o simplemente quería hacer cosas y en el PSOE de Pilar Sánchez eso está prohibido así como ser válido y con inquietudes. Posiblemente la alcaldesa entrará la primera en el mundo tenebroso del olvido. Cuando pierda la alcaldía ya nadie le dará palmaditas en el hombro, ni le dirá lo buena, guapa e inteligente que es. Los falsos cumplidos duran exactamente lo que dura la fugacidad del poder. Al compañero, sin embargo, nadie lo olvida. Su huella, su honestidad es indeleble. José Luis no estás olvidado, para nada. Tú seguirás siendo un referente, mientras que otros y otras pasarán espero que muy pronto al mayor de los olvidos. Que no se acuerde de ti la alcaldesa es tu mayor valor y por lo que mereces el mayor de los recuerdos. No hace falta José Luis ni que cite tu nombre con tus apellidos, ya todos sabrán que me refiero a ti. Realmente nadie te olvida y te echamos mucho de menos. �nimo, a recuperarse y a volver a tener ilusión por todo, quizás no tanto con la política. No merece la pena, José Luis nunca tendrá arreglo. En la mili decíamos que ponle al más inútil unos galones aunque sea de cabo, y parece capitán general. En política lo mismo.